Y lo pierde a toda Prisa, otrora poderosísimo grupo de comunicación y que anda últimamente negado con los balances y despechado con Florentino. De lo primero se desprende la absorción de Cuatro por parte de Telecinco, la pérdida de Premier&Champions para el plus, los rumores del fin de El País en los quioscos y la necesidad de subastar los derechos del Mundial para su emisión en abierto.
Lo segundo es consecuencia del viraje a la derecha en la segunda versión de un Florentino que acostumbra a apostar siempre a caballo ganador. Y ese caballo ganador lleva corpiño, lidera la venta de tebeos deportivos, sube como la espuma en los EGM radiofónicos en base a monocolores tertúlias (Ares, Portillo, Fernández-Ochoa, Nieves y Gallina son menos Blancas que las interminables charlas de carajillo de Gozalo y García Caridad) y, por encima de todo, le ayudó a quitarse de enmedio al bendito Calderón y al incauto Onieva.
Hablábamos de la pérdida del acento de Kaká, segundo fichaje más caro de la historia y un futbolista demasiado alejado de su mejor momento como para poder rebasar el agobio de tantos ceros y expectativas. Y aún gracias que el Barça del triplete le ha traído a CR96, que le libera de toda responsabilidad por el módico precio de un penalty de cada dos. Ni la conversión de las penas máximas ni algún aislado zapatazo han tranquilizado a la parroquia blanca, que anda ya con la mosca tras la oreja con la bajísima incidencia de KK68 en el juego del equipo que tanto está haciendo sufrir a FP260.
Tras los escasos pero sonoros trompazos del Madrid son multitud los dedos que van señalando al menguante argentino como una de las causas de la impotencia merengue en la temporada de la ilusión. Los índices más incisivos y deshinibidos provienen del antiguo imperio del monopolio, más que nada para compensar los virulentos palos que los medios oficialistas vienen dispensando a Higuaín y Pellegrini, culpables junto a Ronaldo de que el madridismo aún sueñe con salvar los muebles antes de huir de la ciudad el 22 de mayo.
Razón no les falta a los Ronceros y Relaños que tan atareados andan estos días señalando al caro y ensalzando al bueno. Tan a pecho se han tomado la numantina defensa de Higuaín que ayer hasta quitaron a Cristiano de la portada para poner ahí al argentino. Y eso, tal y como están las cosas, tiene más mérito que marcarle tres goles al Valladolid.