Cuando uno gana algo siempre quedan deudas por pagar. Cuando un equipo de fútbol hace la mejor temporada de la história de este sacrosanto deporte, evidentemente deja muchas deudas por pagar.
Todo empezó en Stamford Bridge, y qué bonito y poético que así sea. El dia en que Iniesta perpetró el Iniestazo, un 28 de abril del 2009, el árbitro noruego, robusto y calvorota como Shrek, y con dos pelotas como dos campanarios, se tragó dos penalties meridianos en el área del FC Barcelona. It´s a fucking disgrace, dijo Drogba. Y la prensa mesetaria ardió. Platinato, Villarato y todo lo que termine en ato, como por ejemplo potato. Con el tiempo, el mensaje calaría en Europa. En el Giuseppe Meazza de Milán se saldó la deuda, muy cara, aunque sigue valiendo la pena.
Poco después del milagro de Londres el mismo Iniesta caería lesionado de cierta gravedad. Quedaban 3 semanas para la final de Roma y se le diagnosticaron 4 de baja ( sé que voy errado con los números pero procede de todas formas ). No se la quería perder por nada del mundo y optó por acelerar la recuperación…y hasta por infiltrarse. El equipo lo necesitaba. Por aquel entonces Don Andrés era de los 3 mejores del equipo y había que arriesgarlo todo para darle el broche a una temporada espectacular. O´fenómeno del twitter llegó a Roma, asistió para el 1 a 0 de Eto´o, y se rompió bien roto. Harían falta 4 meses para que volviera a jugar regularmente…y 2 más para que se volviera a romper. El precio lo hemos visto, una temporada 2009-2010 sin Iniesta. Otra deuda saldada.
Uno de los temores que inunda el cuerpo técnico de un equipo que se proclama campeón de todo es que haya jugadores que se acomoden, o se suban a la parra. Afortunadamente no fue así en la mayoría de los casos. En cambio Henry y Márquez sí cumplieron con el tópico.
Quizás porque el primero acabó pagando también su deuda particular, la de la mano que clasificó a Francia para el Mundial de Suráfrica, una acción que hizo feliz a un pais e indignó a otro. Sin embargo la prensa mesetaria volvió a tenerlo claro: Henry tramposo.
O quizás porque una cosa es desear seguir levantando orejudas, y otra es tener el hambre necesario. Y ya sabemos que el hambre de triunfos es un factor crucial en el mundo del fútbol, que le pregunten sinó a Samuel Eto´o Fils. Resultado, una temporada lamentable. No menos que la del renovado Márquez, una renovación a todas luces incomprensible a tenor del rendimiento ofrecido por el central azteca.
El marfileño Touré, otra pieza clave de triplete, no se acomodó. Ni mucho menos. Pero quizás, siempre quizás, se subió a la parra – mal aconsejado por su funesto representante con exigencias tales como la titularidad, o una buena subida salarial. En lo primero le perdió la razón, en la segunda, las maneras. Y luego, la Copa de África para acabar de rematarlo.
El perjudicado en todo ello fue el Barça, al poder no poder contar con el mejor Touré hasta el final de temporada.
Sin el concurso de tres puntales del Barça del triplete, Touré, Márquez y Henry, sumados al más decisivo todavía Andrés Iniesta, más las ” deudas arbitrales ” acumuladas en Stamford Bridge, más el polémico trueque/traspaso del león indomable – contabilizar 5 bajas del once inicial – són demasiados lodos como para no contaminar el agua. Un sexto titular, Abidal, también pagó la factura al descomunal esfuerzo físico.
Más todavía? pues tendré que decir que sí. Rotundamente sí. Los medios catalanes, contribuyeron sin quererlo en otra nefasta deuda: la de la vanidad.
Que si la temporada perfecta volumen XII, que si el reportaje de los profesores de Pep en Santpedó, que si un libro dedicado, que si otro libro, otro, otro más – ¿ que se ha muerto ? – un Recorda Mister en Barça TV – ¿ que se ha ido ? – que si los demás juegan bazofia y nosotros somos la repera, que si Florentino jojojo, que si Valdano jajaja…vale, vale, anem fent.
Todo eso caló, y la opinión generalizada del aficionado era que nos los pasariamos a todos por la piedra sí o sí. “Aixó, sí, amb humiltat” decían, bien aleccionados por Pep. Pero tan sólo era una falsa humildad. Lo que en realidad querían decir es que nos los follabamos a todos con la punta del nabo.
Quizás hayamos pagado ya todas las deudas, pero seguimos sufriendo sus consecuencias. Quedan 2 partidos de Liga. Miento. Queda 1 partido de Liga, el del Pizjuán. Olvidáos, el Madrid gana hoy en Ses Illes. Las hemos pasado putas para llegar hasta aqui pero dependemos de nosotros. Si ganamos la FINAL de Sevilla, TODO habrá valido la pena.
Algunos matarán los nervios jugando al ” pase lo que pase ya estoy satisfecho “, otros jugaremos al ” susto o muerte ” , ¿ a cual te apuntas tú ?