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Yoyalodije

BENVINGUTS AL BARÇA REAL

Estoy firmemente convencido que las elecciones han conseguido su finalidad: tener un presidente del agrado de la mayoría de los socios. Sandro Rosell es el candidato perfecto para la inmensa mayoría de los socios del FCB que ha ido a votar.

Soy de los que piensan que lo ocurrido hace 7 años fue un accidente, un acto de venganza a la ignominiosa gestión del tardonuñismo. Un auto-castigo que el soci se infringió por la desastrosa decisión tomada pocos años antes: nombrar presidente del club a Gaspart. Y por eso muchos se tiraron en masa a votar a quien hasta entonces había sido el enemigo del barcelonismo.

Pero ahora volvemos a la normalidad. El soci del Barça no se conforma con títulos. Diría más, lo realmente importante para el soci del Barça no son los títulos. El soci del Barça puede llegar a perdonar una etapa más o menos larga sin abrir las vitrinas del Museu para añadir títulos, pero lo que por encima de todo va a valorar es sentirse soci-propietari del club.

Para muchos el Barça es lo más importante en Catalunya y sentirse dueño de eso es muy satisfactorio. No debe compartir su voto con unos pocos millones de electores como en las elecciones al Parlament, ni con muchos millones como en las generales. No, el futuro de lo más importante lo decidimos unos pocos (55.000) y quien quiera mi voto debe cumplir un perfil. Y Sandro Rosell cumple ese perfil. Como muy bien explica Alex Santos en su blog, Rosell no ha ganado por proponer un club radicalmente distinto, no. Ha ganado al prometer un nuevo estilo de hacer las cosas, vamos, un nuevo talante. Y la mayoría de los socios ha querido que sea el presidente.

Que debemos hacer aquellos que nos sentimos en minoría? Aquellos que pensamos que la mayoría de los socios eligen a un presidente pueden estar equivocados?

Primero, aceptar nuestra condición de minoritarios. No vale aquello de “como la mayoría no piensa como yo me largo a casa”. No, yo soy del Barça por mucho que no esté de acuerdo con lo que opinan la mayoría de los socios del Barça. Que el presidente del Barça toma decisiones distintas a las que yo tomaría? eso no va a hacer que me sienta menos identificado con el club.

Segundo, seguir disfrutando de las victorias y sufriendo con las derrotas. Una victoria ante el enemigo nos va a sentar igual de bien se siente quien se siente en el palco o en el banquillo. Una derrota va a producir el mismo dolor.

Es lógico pensar que mientras han mandado los “nuestros” (muy entrecomillado, digamos que mientras ha imperado en el club nuestra filosofía de hacer las cosas) hemos tenido la actitud que considerábamos mejor para el club. Sería ilógico cambiarla ahora.

Y por último recordad que el club, los demás socios, siempre nos han tenido cuando nos han necesitado. Para ello, podemos recoger el ejemplo de Cruyff: vino para ganar una liga después de “14 anys de passar gana”. Tras su marcha muchos prefirieron quedarse con el recuerdo de que en los partidos de fuera de casa (que probablemente no habían visto ni uno por la tele) se dedicaba a sacar los saques de banda. Mucho tiempo más tarde se volvieron a acordar de Cruyff cuando peor estaba el club, con unos jugadores amotinados pidiendo la dimisión del presidente y con el Madrid acumulando ligas a bases de buitres y volteretas. Se ganaron 4 ligas seguidas, la primera Copa de Europa de la historia, se jugaron otras 3 finales europeas y fuimos admirados y referenciados en todo el planeta futbolístico. Y algunos prefirieron recordar a eskurzas, korneivs o angoys para darle la patada en el trasero y acusarle de querer el mal del Barça.

Pasaron muchos años y cuando el club volvió a estar hundido, pasando miserias para clasificarse para la UEFA, el soci-propietari decidió dar las riendas del club a alguien que queria ser aconsejado por Cruyff. Y se ganaron 4 ligas y 2 champions, se hizo la mejor temporada de la historia, tuvimos a 2 entrenadores que a parte de ganar potenciaban nuestra buena imagen, y alguien tuvo un gesto con Cruyff y lo hizo “soci d´honor amb rang de President d´Honor”. Ahora cuando estamos en lo más alto, el soci-propietari ha decidido volver a cambiar el rumbo y son muchos los que quieren replantear la distinción concedida y darle una nueva patada para que deje de perjudicar al club. Pero soy de los que piensan que si un día lo volvemos a necesitar lo volveremos a tener.

Creo que es un buen ejemplo para aquellos que sientan que les han dado una patada en el trasero o para aquellos que se hayan visto sorprendidos por la voluntad del soci-propietari.

Yo pienso seguir con la misma actitud que tenía antes de estos 7 años y durante estos 7 años: SEMPRE AMB EL BARÇA.