Tempus fugit, culerdos. Parece que fue ayer, o al menos a mí me lo ha parecido, cuando jugábamos el primer partido de Champions contra el Spartak de Moscú y hoy cerramos ciclo contra el Benfica con los deberes hechos y con algún que otro susto por el camino. Porque en esta liguilla ha habido partidos en los que se ha rozado la debacle como el citado del Spartak en el Camp Nou o el del Celtic también en casa. En ambos se tuvo que remontar una situación adversa y en este último, fue el gol de Alba sobre la bocina el que salvó el, casi seguro, empate. Pero, afortunadamente, se salvaron los puntos y no hubo mayor sorpresa que la de Celtic Park, pues como tal (sorpresón) cabría calificarse la derrota por la mínima en Glasgow, una derrota que provocó lágrimas en algún aficionado ilustre como Rod Stewart y no demasiada preocupación entre la culerada.
Quiero recordar que precisamente fue en esa derrota cuando me sentí orgulloso del comportamiento de nuestros jugadores, técnico y, por qué no decirlo, directivos que supieron estar a la altura de la grandeza de nuestro club dejando una imagen de fair play y elegancia que destacaron todos los medios británicos(no lo españoles, of course) y la propia web del club escocés. Y es que ese “Fc Barcelona-world class in every way” lo sentí como un título más.
El Barça, por contra, hizo los deberes en Lisboa y Moscú, y con algunos momentos de gran fútbol redondeó la clasificación haciendo inútil la jornada de hoy, más allá del milloncete de euros (quién lo pillara…) y el récord de Messi que ya está a tocar. Respecto al fútbol mostrado en esta liguilla no es para estar eufórico pero, visto lo de otros grupos, el Barça ha mostrado suficiente poderío (como el que más) para volver a disputar el título de Wembley junto con los otros favoritos de este año: United, Juventus, Bayern, Dortmund y el propio maligno.
Hoy estoy seguro de que Tito sacará un equipo bastante titular pues es esencial dar una buena imagen en Champions, además de hacer caja, y salvo los seis descartados (Iniesta, Xavi, Mascherano, Pedro, Jordi Alba y Cesc) entiendo que saldrá con: Pinto, Montoya, Puyol, Piqué,Adriano, Busi, Thiago, Song, Villa, Messi y Tello. Deulofeu y compañía esperarán en el banquillo.
Ahora vienen unas semanas en las que hay que centrarse en la Liga para, si puede ser, dejarla medio sentenciada y así poder afrontar el rival de octavos que puede tener su miga dependiendo de lo que ocurra en esta jornada, entre “biscottos” y otras picarescas. Ya hemos dicho que la eliminatoria de octavos en febrero es crucial en la temporada porque entre medio está el partido del Bernabéu, un partido que puede dejar sentenciada la Liga. El escenario ideal sería un rival duro para el maligno y que no sacara un buen resultado en la ida para que tenga que jugársela a la vuelta y con el Barça por medio y la grada pidiendo la cabeza del malquerido portugués. Por pedir…