Categories
Crónica

Épica y estética

Ayer cuando acabó el partido y viendo los comentarios en el Yoya pensé en la cara que pondría un aficionado del PSG si llegara a leer lo que anoche se escribió por estos lares. Seguramente diría que estos culerdos están locos, acaban de eliminarnos y están hablando como si hubieran sido ellos los que no hubieran pasado. No digo nada de los aficionados milanistas que, pese a sus siete Copas de Europa, recibieron una tunda del calibre cuatro cuando más felices estaban. Y yo pienso ¿esta autoexigencia es sana? Cualquier aficionado de los otros tres semifinalistas ¿estará criticando hoy el juego de sus equipos? No lo entiendo, la verdad y creo sinceramente que tantos años de caverna nos están influyendo. Porque ¿cómo pasamos a la final de París?sufriendo como perros contra el Milan. No digo contra el Chelsea y también , por qué no decirlo contra el Arsenal o el mismísimo maligno antes de la expulsión de Pepe. Está visto que la memoria de algunos es muy selectiva y que no piensan la dificultad que supone llegar a esta fase de la competición ¡por sexta temporada consecutiva!. Me da mucha pena por ellos, la verdad.

El análisis del partido de anoche entiendo que es muy simple, el Barça no supo decidir si era lobo o era cordero y en la indecisión dejó pasar la oportunidad que le dio el PSG en la primera parte. Los de Ancelotti se dieron cuenta de la indeterminación conceptual del Barça y fueron a por todas, pero para su desgracia marcaron demasiado pronto. Salió entonces el lobo, que no Messi, y durante los veinte minutos en los que el Barça estuvo eliminado el PSG no supo aprovechar la ocasión única que tuvieron de estar en semifinales de Champions y sucumbieron ante el empuje que supuso la salida de un Messi mermado al campo. Tras el gol, el Barça sufrió pero más por la incertidumbre del resultado que por las ocasiones falladas del PSG. De hecho no recuerdo ninguna clara  a partir del gol de Pedro. Nadie lo recordará pero el Barça estuvo en ese tramo de partido muy canchero, sabiendo perder tiempo, sacando córners en corto para Messi y parando el juego constantemente. Eso también tiene mucho mérito. Al final todos nos quedamos como si hubiéramos jugado el partido nosotros pues la tensión fue grande, muy grande.

Los entrenadores de sofá ayer criticaron duramente la alineación de Tito. No entendieron que eligiera a un jugador experimentado como Adriano por un chaval que apenas ha jugado veinte minutos importantes en toda su carrera. Los que no entendieron que jugara Pedro o Villa y no Alexis, son los mismos que le están dando cera al chileno casi desde el día que se puso la camiseta azulgrana. Los que criticaron la presencia de Xavi en el equipo quizá olvidan la importancia de su juego en la eliminación del Milan en la ronda de octavos. En definitiva olvidan que esto es una plantilla, un equipo y que lo que se le debe exigir a los que salten al campo en una ronda de cuartos de final de Champions es que compitan, como compitieron Alexis y Cesc en la ida, un partido que ayer muchos olvidaron de golpe.

Quien piense que el Barça no es favorito en estas semifinales que haga una encuesta en Munich, o en Dortmund. Que no la hagan en Madrid porque estos comen aparte pero también llevan doce años ganando la décima. El Barça recuperará al mejor Messi para las semis, y dará oxígeno a Xavi para que pueda mejorar sus problemas físicos. El Barça en definitiva,tiene las mismas opciones que el que más de ganar esta Champions que, eso sí, después de lo que ha pasado esta temporada, tendrá muchísimo valor casi tanto como la primera.