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Yoyalodije

La verdad está ahí fuera

Tras hacer caso omiso a las huecas advertencias del aprendiz de bioalfarero, no sin antes dedicarle un leve mohín de superioridad conspiranoica, todo sea dicho, el detective miguelix prosiguió su investigación guguelerciana guiado por un agudo presentimiento de que, en algún rincón del planeta, en estos mismos instantes, se agazapaba la más inaudita de las verdades. Apenas hubo recorrido 10 000 kilómetros a vista de Baumgartner, cuando se topó de bruces con un dato demoledor que quizás tenga una relevancia crucial (si bien, hay expertos que aconsejan admitir que es más que posible que no. Jajaja, expertos….). La historia de Sandro y Teresita podría tener más historia de lo que pensamos. Quién sabe, podríamos estar ante algo gordo, gordo y más que gordo; un abigarrado tapiz en el que la recia urdimbre de un joven y talentoso ESADE catalán de buena cuna, gustos frugales y amigo pastor, armado con una frescura y un desparpajo arrolladores y un extraordinario domino de la inteligencia emocional se entrecruza con los más exóticos y novelescos hilos de magia tropical, placeres ocultos, avionetas, Aután, caipirinhas mal bebidas, Jeeps y pistas de tierra, collejas inopinadas, maratones de sexo hipnótico y carnavalesco con ciertos seres y objetos de los que usted no quiere oír hablar, remordimientos mal reprimidos, Aftersun en garrafas, contactos con los clanes, sesiones clandestinas de candomblé en serio, dolares que aparecen y desaparecen de la cartera de manera misteriosa, países amados que mejor no volver a pisar…

¿Quién es Teresinha? ¿Por qué O Peixoto se pone nervioso cuando la nombra? ¿Cuál es el verdadero origen del apodo Peixoto? ¿Qué oscuro pacto firmó el President del Barça con los dioses antiguos en una polvorienta cabaña del interior del estado de Bahía? ¿Con sangre de qué animal? No puedo responder a ninguno de estos interrogantes. Aún. Tan solo quiero que contemplen con sus propios órganos de visión los vagos, pero no menos sugerentes, indicios a los que me remito:

La proximidad de O Peixoto y Santa Teresinha puede ser una mera casualidad… Claro.

Aún estoy tratando de encajar la pieza Alves en este puzzle… ¿Ideas? Descabelladas, por favor.