Lo más gracioso es que entiendo por qué esa “mística” se ha impuesto, sobre todo porque la comparto.
Cojan al mejor director y guionista inglés y pongamos que se plantean rodar “la épica que rodeó al partido de desempate para el ascenso a Third Division entre el Bristol Grapepinchers y el Bournemouth Apostoflants. Con Ewan McGregor y Brendan Gleeson en el papel de líderes de las respectivas hinchadas, Benedict Cumberbatch y Jude Law como las estrellas enfrentadas de ambos equipos y John Cleese y Hugh Laurie como los entrenadores”. Vamos, de entrada voy a verla de cabeza.
Ahora plantéense el mismo argumento pero con el elenco de aquí: “La épica que rodeó al partido decisivo en el playoff de ascenso a 2ª B entre la Balompédica Sepulvedana y el Polideportivo Ejido. Con Javier Cámara y Carlos Areces en el papel de líderes de las respectivas hinchadas, Mario Casas y Fernando Tejero como las estrellas enfrentadas de ambos equipos y Antonio Resines y Fele Martínez como los entrenadores”. Bajonazo letal y no la veo aunque me paguen un sueldo de por vida.
No hay más preguntas, señoría.