Me ponen de los nervios. Por puntos:
Llego a las 14:40 a la farmacia. Solo he ido a buscar el medicamento crónico para mi hija, y había dos señoras mayores en la cola. Estampa típica de ambas: pelo crepado, bolsas de tela, voz de pito… hablando entre sí como si fuera la puta Boquería. Y ya piensas, miau.
Empieza el festival de venga a sacar recetas, de ellas, de sus maridos, de aquí me pones estos pero de estas no que todavía tengo, y algo para el dolor de rodillas, y lo de las mascarillas gratis como va, es que tengo las tarjetas de toda la familia perquè saps nena jo quan vinc a la farmàcia ja carrego. Y ahora espera que ese no lo tengo, te busco un substituto, vols alguna cosa més? Com anava lo de les mascaretes? Ay, mírame tú las monedas que no se si tengo prous. Ostia está el sistema informático caído, viene mañana? No, ya me espero.
Las 15:18
– Mi turno: una caja de singulair. Con tarjeta. Muchas gracias.