No sé si lo he comentado alguna vez, pero me gustaría avisaros de que todas las noticias de trueques en la prensa son fakes.
Quicir, ya sé que Laporta lo ha comentado, pero es estrategia. Creo que es mejor ir de pobre, diciendo que no tienes un euro y que si no es por trueques no fichas a nadie (aunque luego nunca haya trueques) para intentar rebajar algún precio, que la estrategia de Bartomeu de ir cual tonto del pueblo con billetes asomando por los bolsillos tras tocarle la lotería, entrando al concesionario y decir, “¿Qué me vendes por todo este dinero que tengo aquí?”.
Además para que se de un trueque deben darse cuatro condiciones que es imposible que se den nunca:
– Que tengas un jugador que quieras echar
– Que haya un equipo que quiera a ese tipo
– Que ese equipo quiera echar a algún jugador
– Que a tí te interese precisamente ese jugador.
Imaginemos a Laporta cargando el maletero y viajando en coche hasta Manchester, Eurotunel mediante. Llega a las oficinas del United, y se encuentra con el señor que vende jugadores allí.
Jan abre el maletero y saca una bolsa de basura en la que algo se mueve en su interior.
+ Bona tarda, vengo a negociar por ésto.
– Wait, lo vas a abrir???
+ Sí tranquilo que ya ni muerde.
Jan abre la bolsa y aparece…. tachááááááán, el Muerto de Badía arrastrándose, mostrando todo su físico de extra de walking dead, “Eee-cooo-siiiis-tee-maaaa, arhfffhsssss”, “Reee-noo-vaa-cioo-neeeessshhhh ahhhsfff”.
+ ¿Qué me das por ésto? Vengo a hacer un tru-tru-trueque! Seguro que te sobra algún jugador.
– Oh my gosh. Errrr pffff sí me sobran, pero para cambiarlo por ésto no tengo nada.
+ Venga hombre, si ya tengo aquí el puro para fumárnoslo juntos, algo tendrás aunque no sea titular.
– Not sure… a ver hay un chaval del equipo de juveniles que se cascó los dos ankles en los autos de choque del village, pero le veo más salida de balón que a ésto que me traes.
+ No te preocupes hombre, que tengo más. Venga Jordi, baja del coche que ya hemos llegado a Ankara.
Mission Impossible.