Lo de esta tarde es un reto. De hecho, es lo que me ha llevado a salir de los túneles más profundos del norte para escribir cuatro ideas al respecto. Siempre que llegan los partidos de primavera -con himno propio previo- la dificultad se dispara. Sobre todoante estructuras tácticas y conductas poco habituales como las del rival de hoy. Y la sensación de vida extra que otorgó el gol de la ida confirma la complejidad. Porque podremos entrar en plantillas, entrenadores, estrellas o sistemas coyunturales, pero si algo es una constante en la historia de la CL es que el Chelsea FC es un rival complejísimo para el FCB. Más si viene como vigente campeón de la Premier League.
La analogía de Armageddon (para algo sirvió el film) podría ser una buena guía para enfocar lo de hoy. Decía algo así más o menos: ¿que pasa si te explota un petardo encima de la mano? Pues que te quemas…pero, ¿qué pasa si te explota dentro con la mano cerrada? Pues que adiós dedos. Ajustemos la imagen un poco más.
Veamos la estructura del equipo inglés como una mano que se abre para después cerrarse sobre el rival con la velocidad que le interese. Tratar de inutilizarlo, negarle espacios y cuando está exhausto de buscar por dentro y pierde su orden y la pelota abrir de nuevo los dedos con velocidad para salir limpio. Si recordamos el transcurso de la ida esta era una dinámica que se provocaba por la disposición blue. La preparación exhaustiva y exclusiva del rival en la ida mostró una mano amplia que ocupaba todo el espacio con el fin de recoger balón y jugadores rivales. Con una estructura de 3 defensas, 2 carrileros y 3 MPhipermóviles, dificultaba cualquier avance o profundidad lateral encauzando el juego al centro para acosar. El talón de la mano serían los tres centrales, el pulgar y el meñique los carrileros, el corazón Hazard, el anular y el índice William y Pedro. Y gran parte del partido les funcionó. Marcos Alonso y Moses no miraron a su portería prácticamente nunca y sólo las genialidades de Iniesta y Lío les hacían dividir su atención. Esta colocación les permitía subir a buscar a medio campo, recibir de cara y ocupar el carril de los dos elementos ofensivos más sorpresivos para los rivales: los laterales culers. Jordi Alba entendió que no templar su altura era una trampa y Sergi Roberto fue el argumento para romper la presión conduciendo interiormente. Gran partido de ambos. En la parte trasera el 3 vs Suárez permitía que Azpilicueta pudiera saltar a apretar sus apoyos y/o desbordes de Andrés y dejaba la zona media, la palma de la mano, para un Kanté y Cesc que siempre tenían el apoyo de Pedro y Willian para cerrarse y no ser inferioridad. El francés para robar y ser sombra de Lío y Cesc para lanzar verticalmente la transición. Si en alguna acción era superado Kanté, comenzaba a perseguir a su par y rápidamente podía saltar el otro MC o un central y temporizar para aumentar el repliegue intensivo provocando pases a banda. Donde siempre están sus carrileros metiendo el pie.
Prueben con su mano (!), solo Hazard (dedo corazón) quedando algo más descolgado para formar un FuckYou!sútil. Lisérgico pero visual.
Si le unimos las pocas líneas de pase por delante del FCB por pura precaución quedaba un ataque romo. Además, la necesidad de un Busquets más bajo para que no igualaran la primera línea los de Conte dejaba todo el espacio central para un gris Rakitic y un Paulinho que cuando se aleja del área rival muestra su pie de madera y poca cultura asociativa y posicional. Lo del brasileño fue un partido muy completo: empeoraba cada ataque y entorpecía la circulación con su posicionamiento sin balón. Sin embargo y tras todo lo expuesto la ida estuvo aún mucho más marcada por el recelo total que tuvo el FCB a perder en la ida la tercera eliminatoria de CL consecutiva. Se notó en la conducta de las 4 leyendas de las que dispone el equipo y que se contagió, en positivo, a Jordi Alba, Ter Stegen y Suárez que aplicaron a la realidad la resobada frase de que las eliminatorias duran 180 minutos.
Como suele suceder a menudo, no tienen todos los dedos la misma fuerza por mucho que aprieten juntos. La ida dejó claro que tanto el joven Christensen como Rudiger son a día de hoy debilidades competitivas en CL. Les faltan callos y durezas. Ese factor en el Camp Nou saldrá a relucir en forma de desconexiones y toma de decisiones que les hagan dudar más aún. No en la defensa lateral ya que por acumulación y altura son dominantes en los envíos desde banda sino en leer achiques, espaldas y resolución de jugadas en la frontal. Y si hay un delantero que lleva el estrés mental al límite y no permite un respiro es Luis Suárez.
Añado que al notable plan de Antonio Conte le falta (ba) una pequeña pieza que le obligará a tomar partido hoy al no lograr ventaja en la ida. Su plan ofensivo principal de salida (el envío directo vertical) necesita de un referente arriba, el cuál dispone -Morata- pero que al alinearlo le deja sin el trio de MP elimina rivales y dominantes en transición que formaron en la ida. Como perder movilidad en un dedo a costa de ganar presencia. De hecho, el despliegue de Hazard y sus gestos técnicos en primer toque para prolongar balón o ganar tiempo y espacio para la salida de su equipo fueron un arma que fue disminuyendo, o siendo irregular, conforme pasaron los minutos y el desgaste físico hizo mella. La exigencia espacial es enorme y de ahí que cuando el equipo lograba finalizar intentara una presión más efectista que efectiva que ahondaba en las precauciones blaugranas y les permitía vivir en otra altura.
Por disposición y acumulación central, 3 centrales más 2 MC más ayudas de laterales y MP, parece que el Chelsea es muy fuerte por la zona central pero es más bien todo lo contrario. Cuando acumulas tantos efectivos reconoces que su funcionamiento está lejos de la efectividad y solo N’Golo a título individual tiene capacidad de robo. Si el FCB toca por dentro con ritmo puede encadenar minutos de posesión hasta dañar. La palma, no el dorso, la zona crítica. Hasta inutilizar articulaciones desde la base.
Partiendo de la previsible única duda en lo blue (repetir la ida o dentro Morata a cambio de un MP) el FCB tiene una ecuación más compleja. Primero en cuanto a disposición y luego en cuanto a nombres. Aunque por las bajas lo segundo condicionará lo primero. Ernesto está haciendo un trabajo enorme. Ha rehabilitado a un depresivo hasta darle la forma de un funcionario del grupo A. Aceptando lo que no tiene de forma regular (desborde por banda en estático, potencia en transiciones) había potenciado rasgos dominantes (salida de atrás, fases de posesión+presión tras pérdida+posesión, recuperar leyendas del grupo) hasta lograr que Lío pudiera jugar de nuevo más cerca del área rival que del círculo central. Porque por fuerte que suena, esta es la clave de todo este deporte la última década y las veces que se ha logrado la cosecha ha sido enorme. De ahí que los rivales acepten que Lío domine, pero buscan imponer la zona del campo. Este suministro más productivo para el rosarino lo había logrado con un Iniesta en modo cacique por la zona izquierda y un Busquets que con la evolución de Rakitic puede dividir su esfuerzo a la hora de presionar. Con la posible baja de Andrés apuesto por la entrada de André. Que como su nombre deja claro carece de la s a día de hoy. S de seguridad, superioridad y solvencia en sus acciones. Entiendo su puesta en escena esperando el suficiente, cumplirá a raja tabla lo estipulado, tiene altura y piernas y tras la catarsis pública puede salir algo más liberado. Como quien cuenta sus miserias y pierde algo de peso, pero produciéndose un juicio público es apostar fuerte. Aunque aclaro que a poco que pueda jugar Andrés una parte decente, saldrá. Demasiada diferencia en todo.
Pero volvemos al punto crítico. El costado derecho. Sin la lesión de Semedo la opción de subir la altura de Sergi Roberto era la mejor. Con su baja se abren 3 nombres para el puesto volviendo el de Reus al lateral: Aleix Vidal, Dembélé y Paulinho. En la ida el cambio del primero por el último mejoró al equipo, al menos por orden posicional, presión tras pérdida y por fijar a Marcos Alonso, lo que posibilitó que Sergi pudiera invadir con conducciones espacios centrales para generar superioridades. Lo idóneo, lo ideal e incluso lo que pide la parte visceral es la entrada de Ousmane. Digo visceral porque no tiene ritmo de competición y enfrente hay un sudoku defensivo importante, pero Ousmanemueve cosas. A favor de su entrada:el factor sorpresa, su superioridad en 1×1 respecto a Marcos Alonso, velocidad al espacio y su motivación reivindicativa. Pero cuando la imprevisibilidad y el desequilibrio van unidos se convierte en bidireccional y ante escenarios de repliegue esperando robo y salida por parte londinense puede ser un riesgo difícil de asumir por Ernesto. No entro a nombrar a Paulinho porque su agitación positiva en zonas centrales se convierte en productor de problemas para Roberto por su mala lectura posicional y sus 4 toques para controlar y soltar una pelota. Siempre hacia atrás. A su favor el factor “le cae una ocasión” que el Txingurri contempla. Y el entrenador es de soluciones sencillas.
Es por todo lo expuesto (perdón e desorden) que el FCB debe cambiar la mentalidad respecto la ida y creo que lo hará. Toca resolver la eliminatoria con un Camp Nou de local donde nunca ha ganado el Chelsea y sólo un resultado obtenido en toda su historia le daría el pase. Aceptar que hay que jugar por dentro, entrar en la mano, entender que habrá muchos dedos cerca, buscando, pero la posibilidad de reventarlo todo es factible. O agotarlos de tanto abrir y cerrar. Pero con determinación y contundencia. Si en la ida, acertadamente, Valverde no quiso enviar jugadores profundos para que no saliera a la contra el rival con latifundios a su espalda, hoy tiene que pensar que cuantas más ayudas tengan que hacer en defensa los blues menos fuerza y más lejos estarán de salir. En caso de no hacerlo la mano de Conte empezará a hacerse fuerte recorriendo menos espacio y sentirá que puede apretar selectivamente para correr y encontrar un zarpazo que le meta de lleno en la eliminatoria.
Y aquí vamos a la parte final respecto a mañana y lo que vendrá en caso de superar eliminatoria. Valverde nunca se ha encontrado a estas alturas disputando más de un título en países de primer nivel. Ante escenarios nuevos y de esta altura es cuando se examina lo interno. Puede apostar por un plan de mínimos hasta el final y competirá (el 10 y sus colegas lo aseguran) o tratar de imponer el discurso integrando al joven francés y ganar márgenes. De acción, operatividad y amenaza ofensiva. No hablo exclusivamente de mañana sino como vía de mejora. El equipo ha ido evolucionando del 4-3-3 de inicio al 4-4-2 en rombo de navidad al 4-4-2 en línea actual. Los resultados acreditan todo este proceso, innegable, como acertado. También lo es que el equipo sigue siendo muy sólido sin balón -a niveles de la temporada 04/06 de Rijkaard- pero que cada vez le cuesta más generar en contextos Champions (no Coutinho, obra de la ST) sin genialidad previa del 8 o el 10. Y ante la inseguridad física que tiene el mejor interior del equipo urge buscar agua nueva antes de morir de sed.
Entrar en la mano para reventarla o ser amasado y reducido.
FCB determina.
Cojan aire, vuelven las 20:45.
PD: este HồChí Minh ya tiene a quien escribir.
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Partido correspondiente a la vuelta de los octavos de final de la UEFA Champions League 2017/2018
Fecha: Miércoles, 14 de Marzo de 2018
Hora: 20:45h
Televisado en: BeIn Sports