Está el país revolucionado porque las próximas elecciones a la Generalitat de Catalunya coinciden con el fin de semana del partido de futbol que enfrentará al Barça contra el Real Madrid en el Camp Nou. Hasta Jordi Basté en el editorial de su programa matinal en RAC 1 del miercoles pasado criticaba la fecha electoral escogida por Montilla.
Particularmente, discrepo. Como demócrata que desea la màxima participación posible en la elección del Parlamento de mi país, pienso que el Barça-Madrid evitará,en gran parte,la huida de los “findesemanistas” hacia sus segundas residencias.
Otro tema será la elección de la fecha y hora exactas del partido. Según el gran gurú de las telecomunicaciones Jaume “Gargamel” Roures, no se sabrá – como siempre- hasta unos 10 días antes del match. Yo aventuraría – sin temor a equivocarme ( si erro que el Yoya me lo recrimine)- que se jugará el sabado a las 8 de la tarde. Por si acaso, apúntenlo en sus agendas.
Otra fecha importante,pero que ha creado menos protestas,es la de este sábado.Supongo que pocos se han quejado porque,con las muchísimas ganas que hay de futbol, sobretodo del que se ve en directo en el estadio ( porque del televisado llevamos verdaderos empachos), el socio y aficionado solo piensa en disfrutar del primer triunfo de Liga en el Camp Nou.
Coincide el partido, jugado en horario de media tarde, con la manifestación del 11 de Setiembre, la Diada Nacional de Catalunya.
Los catalanes, que estamos muy sensibles últimamente ( y con razón), tenemos serias dudas de a donde acudir. Pensamos que esta manifestación será tan reivindicativa como la del mes de Julio pasado y muy importante para que la gente no se apalanque y siga activa por lo menos hasta las elecciones de Noviembre.
La solución, sino la ideal, si la más coherente para un enfermo de futbol y de Barça como un servidor de ustedes,es acudir al Camp Nou, “Primer, el Barça”. Pero, una vez allí, demostrar a todo el Mundo ( y el ABC, y La Razón, etc) que nuestro Club también es catalán, que el catalanismo no se inventó con Laporta sino que forma parte de la idiosincrasia del Barça desde sus épocas más pretéritas. Recordemos el porque del exilio de Gamper, el asesinato de Josep Sunyol, la “conversión” del Marqués de la Mesa de Asta y, como no, la creación del lema que más nos define por parte de Narcís de Carreras.
Por eso, y muchas cosas más, acudamos al Estadio con señales identitarias, llenemos el Camp Nou de “senyeres”, gritemos bien fuerte “Visca el Barça i Visca Catalunya”. El nuestro, el culé, siempre ha sido un catalanismo integrador pero, no son los Presidentes de Cantabria y Extremadura quienes nos deben indicar ni como somos ni como debemos ser.
Demostremos el sábado porque somos “Més que un Club”.
PS: “Que el llegir no ens faci perdre l’escriure”. No nos olvidemos de ganar al Hércules.